Los equipos de barrio y de la Seremi recibieron información para identificar y prevenir los posibles desastres naturales y provocados por el ser humano que puedan ocurrir en las comunidades donde trabajan, incorporando una mirada que busca identificar, informar y educar para salvar vidas.

 28En un país con constantes amenazas naturales y humanas de desastres, y en una región donde nos podemos ver enfrentados a sismos, incendios, aludes, erupciones volcánicas, inundaciones, entre otros, la necesidad de preparar a la población para reducir los riesgos se ha convertido en uno de los objetivos de la política pública y del trabajo mancomunado de instituciones del Estado, que incluye también un cambio de foco desde la reacción ante la emergencia a la prevención y la educación de la ciudadanía.

Es por esto que los profesionales del Programa Quiero mi Barrio recibieron la primera capacitación en esta materia, con la participación del director regional del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, Miguel Muñoz, y el equipo de Reducción del Riesgo de Desastres del MINVU, coordinado por María Ignacia Rojas.

El objetivo de la jornada fue traspasar conocimientos a los equipos de la Seremi y de los municipios para que los puedan trasmitir y aplicar en las comunidades donde se implementa el Programa Quiero mi Barrio.

“A mayor vulnerabilidad, más riesgos, por lo que es necesario generar medidas para contrarrestar la vulnerabilidad”, señaló la coordinadora de RRD del Minvu, explicando uno de los roles que le cabe al ministerio en esta materia.

Por su parte, el director regional de Sernapred, enfatizó que “los desastres no son naturales, las amenazas son naturales”, por lo que se deben generar planes específicos para responder a las necesidades y características de cada territorio.

En este contexto, señaló que la nueva ley de gestión de riesgos de desastres obliga a los municipios a elaborar un plan y a contar con profesionales especializados en la prevención.

“El Plan de Reducción de Riesgos de Desastres debe estar orientado a cómo somos capaces de pensar la ciudad y la comuna desde la perspectiva de la mitigación para hacer menos vulnerables a los habitantes”, afirmó Miguel Muñoz, y recalcó la importancia del trabajo comunitario “todas las personas, en algún momento de su vida, van a estar expuestas a una amenaza”.

En el caso del Programa Quiero mi Barrio, los equipos en terreno contribuirán recabando información técnica y experiencial, en conjunto con los vecinos y vecinas, que les permita identificar las amenazas, vulnerabilidades y capacidades que existen en sus barrios para la reducción de riesgos de desastres, por lo que recibieron herramientas para la elaboración de una cartografía participativa, la que se incluirá en los Planes Maestros de intervención en cada comunidad, que contiene las obras físicas y los proyectos sociales posibles de desarrollar en esos territorios en el mediano y largo plazo.

El próximo 5 de mayo de llevará a cabo la segunda sesión, donde se entregarán contenidos prácticos.